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Frida


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La Casa Azul. Espacio que hasta la fecha emana un profundo amor matizado por colores. 
A pesar de haber visto la exposición con las salas llenas de gente, pude apreciar cada espacio de la casa que habitó Frida Kahlo y Diego Rivera. Los recordaba vagamente pero esta vez lo disfruté como debía. 
Además de su cocina, sus pinturas, sus camas y espejos, alcancé a ver la exposición llamada "Las apariencias engañan" en donde el museo La casa Azul y la revista Vogue rinden homenaje a Frida Kahlo mostrando todas las razones por las que ella era, y seguirá siendo, un ícono muy importante en el mundo de la moda. 
De acuerdo a lo que interpreté y a mi percepción de la moda, Frida Kahlo utilizó sus prendas como tubos de óleo para cubrir lo que pertenecía sólo a aquellos que merecieran su intimidad: los múltiples y dolorosos resultados de las enfermedades y accidentes que padeció a lo largo de su vida. Pero también utilizó sus vestidos para resaltar aquello que la representaba, su país, sus raíces y sus creencias. 
Frida adoptó la Tehuana como su vestido y a partir de ahí, su estilo se volvió una eterna fuente de inspiración. 
Aceptar que una figura como la de Kahlo esté en una revista como Vogue (por segunda ocasión) debe ser visto como la definición exacta de lo que es (al menos para mí) el significado de la "moda". Una simple y diaria fuente de expresión. Si no somos lo que vestimos, entonces nos engañamos todos los días al salir de la ducha. 
Frida Kahlo no tuvo la intensión de ser un ícono, y es precisamente ésta coherencia hacia su persona, lo que la volvió lo que es.  

3 comentarios:

  1. Yo también ya fuiiiii me encantó!!!! Tiene una vibra increíble ese lugar apoco no?

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  2. Quiero visitar este lugar :D

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  3. Cute photos!

    howkatiewore.blogspot.com

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¡GRACIAS!